En su infancia fue un niño muy travieso, hasta que se unió a la fuerza aérea, donde estuvo por 22 años, en un proceso que lo marcó para siempre. Estando en una base militar, tuvo que participar en el proceso de cuidado de naves, todo bajo el contexto de la guerra fría; pero al momento de  retirarse pensó en algo más simple, en contribuir a la sociedad y ayudar en algo que fuera menos destructivo, la educación, porque con esto según sus palabras: “La Educación podría educar a los jóvenes para que resolvieran sus conflictos de forma pacífica”; con eso en mente se dedicó a estudiar pedagogía de física en Matemáticas, para luego llegar a Latinoamérica y empezar a ganar experiencia en un colegio bilingüe de Argentina, lo que lo ayudó para dar el gran paso al otro lado de la cordillera.

Mr. Martin llegó a Chile en 1983, donde fue docente en el Saint John’s school; y luego rector del establecimiento donde incluso se convirtió en el presidente de la Asociación de Colegios Británicos, todo esto, gracias a la dedicación y al trabajo duro en el ámbito educacional. Pero a pesar de este remarcable historial, Mr. Martin intentó generar algunos cambios en Saint John’s, pero no tuvo resultados ya que había un sistema establecido en dicho establecimiento y cualquier cambio no tendría mucho apoyo, pero a pesar de ello no perdió las esperanzas, incluso las aumentó, ya que encontró a un grupo de profesores que tenían las mismas ideas que él.